domingo, 5 de agosto de 2012

Recuerdo de un anhelo

Villa, eres tú
la cuna
de mis lamentaciones,
y el casete rayado
que las mantiene.

Aunque también, eres
un pañuelo rojo y negro
que era una luna blanca,
tornose claro amarillo;
desgastado pero al fin limpio.

El día jueves hoy,
lo malo es que eres amarillo,
y yo te quiero blanco, puro blanco;
no un color parecido.

Oda a la Ceguera

¡Humanos!
Agradezcan que la ceguera
no tenga boca,
pues si la tuviera
seríamos humillados por sus carcajadas
y desearíamos que la tierra nos trague…
hasta desaparecer!
Inmersos en la vergüenza más honda

Y así transcurre la vida,
La ceguera existe
en la claridad obscura

El mundo está lleno de
aromas, sensaciones, paisajes y colores
ocultos a las piedras
¿Eres piedra?

El don de la vista,
caballero estimado
e innato;
detesta ser confundido con su hermano

El gemelo, selecto,
no presta fácilmente su talento
y deja transcurrir al tiempo…
con paciencia y la dosis justa de inocencia

¡Hermanos,
cómo nos va a doler!
nuestra alma se desgarrará
por las zarpas del noble león,
pero hay que armarnos de valor.

Saquémonos,
la venda de un tirón
y gritemos al mundo, con furor:
Yo no soy una piedra, ya no!
Seré luz en las tinieblas…